miércoles, 31 de enero de 2018

Maravillas de una de las aves autóctonas del archipiélago español


LA MAGIA

DEL CANARIO


              Por David Aréchiga Landeros*
  El canario es una especie paseriforme de la familia
de los Fringílidos. Es una ave autóctona de las Islas
Canarias, azores y Madeira, archipiélago español.
Es tan bello su canto que alguien llegó
a pensar que su canto es un idioma de esas
aves para comunicarse con
los demás, incluyendo los humanos.
  Ignoro si mi madre sabía algo sobre esa versión,
pero lo que me
consta es que desde niño mi madre tenía en
casa una pareja de canarios
en jaula y que antes de hablar yo comencé a
silbar, o a "chiflar" como
decía la plebe de aquellos tiempos antiguos.

Mazatlán, Sinaloa

  También recuerdo que además de imitar a
los pájaros en mi niñez,
tambien mi mamá me mandaba al mercado
del centro de Mazatlán, Sinaloa,
haciendo media hora de viaje en camión, y
era el único lugar donde
vendían alpiste, comida predilecta del canario,
en una tienda de un
comerciante famoso en el mercado: Don Chon.
  Luego, cuando ya empecé a hablar después
de chiflar, y ya en la escuela primaria, leí
en alguna parte que el té de alpiste era bueno
para la garganta y para aclarar la voz. Yo
de inmediato relacioné lo
anterior con los canarios y le pedí a mi
madre que me hiciera el té de
alpiste que yo seguía comprando en la tienda
de Don Chon, en el mercado grande.
  Lo cierto es, sin exagerar, que tomando té
de alpiste yo comencé a
cantar desde niño en el baño o en el
bosque de manglares del estero
cercano a mi casa, a donde iba a pescar sólo,
y si no llegué a tener la voz de Pedro Infante y
Jorge Negrete, les aseguro que no me hago
menos respecto de "El Piporro" y
Lorenzo de Monteclaro, o como dice el
vulgo: "No canto mal las rancheras", modestia aparte.
Pedro Infante y Jorge Negrete

  Pero creo que ya me salí un poco del tema,
perdón, porque lo que yo
les quiero decir sobre la relación de los
canarios con el alpiste de
la tienda de Don Chon, es que con el
paso de los años, coincidentemente, me casé
con su hija Ana, y cuentan los chismes
de la época que yo le llevaba serenata
a chiflidos desde chiquito imitando a
los canarios, aunque yo les aseguro que
no me acuerdo, pues el alpiste
no es bueno para la memoria.

    Será el sereno, pero lo que sí les puedo
asegurar, es que en mi
caso, en eso de escoger mujer algo tuvieron
que ver los canarios de mi
niñez y el alpiste que vendía Don Chon, mi suegro.


  Por último, les diré que mi esposa, aunque
no canta ni chifla, tiene
una buena forma de comunicarse conmigo,
y por si hubiera alguna duda,
gracias a eso estamos a punto de cumplir
los sesenta años de casados,
con cuatro hijos, cinco nietos y una bisnieta
que ya empieza a chiflar.





  Resumo:

No cualquier canario puede
llegar a ese aniversario,
porque
en lo general, los canarios
mueren jóvenes. En eso consiste
la magia de los canarios.





dalan16@hotmail.com  *Doctor en Ciencias.
                    Universidad de Guadalajara.



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Guadalajara, Jalisco, México, miércoles

31 de enero de 2018

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